"La vida es un grito a la lucha interior, a la superación personal, a vivir, a creer en sí mismo, a luchar sin rendirse jamás, el camino de la vida es diario y nada puede pararte, sempre avanti es el lema"

jueves, 26 de febrero de 2015

Sombras en el bosque....Yesterday

Ayer: Ayer estaba lloviendo, ayer pensé en intentar lo que no siempre es fácil, cumplir la frase: "Ya no espero a que pase la tormenta, aprendí a caminar bajo la lluvia", así que una vez más, a media tarde me cargué de ropa de repuesto por si acaso, paraguas, y me fui a un monte al lado de mi casa.

La lluvia del inicio del camino había dejado paso a la nieve, que intentaba posarse sobre las húmedas ramas de las encinas. Poco a poco, conforme ganaba altura, la nieve ganaba la batalla a la humedad reinante, hasta que un manto blanco cubría todo lo que me rodeaba.

El último cuarto de hora de subida la blancura de la nieve me rodeaba.

Llegué a la cima, donde había una pequeña ventisca, miré a mi alrededor, la blancura me rodeaba, las antenas de telecomunicaciones cercanas, testigos mudos de mi presencia, soportaban el temporal. el cielo gris, brillaba anaranjado por el reflejo de las luces de la ciudad debajo de la montaña. Una solitaria furgoneta había burlado la blancura de la carretera que subía a la cima, sus ocupantes contemplando el paisaje nevado que todo lo cubría,

Yo, allí, en la cima, en la que estuve dos o tres minutos mirando a mi alrededor, corto tiempo en el exterior, largo tiempo en mi interior.

Ya se había hecho de noche, así que encendí mi frontal, y comencé la bajada por la misma subida, ese camino que tan bien conozco, pero que cada vez es distinto.

Conforme bajaba, la nieve del camino, dio paso al barro, tierra y agua fundidas bajo mis pies, sobre los que caminaba, salpicando a mi alrededor. Me paré, apagué la luz, y aunque el reflejo de la ciudad iluminaba un poco, la negrura del bosque era preciosa, inquietante, sombras a mi alrededor, que se acentuaron al encender mi frontal e iluminar a mi alrededor, yo era una sombra más, algo más que estaba allí, mirando, sintiendo, como los árboles que me rodeaban.

Seguí bajando, hasta pasar la última parte del camino, barrizal bajo mis botas, hasta llegar al coche.

Volví a casa, dejé atrás la blancura de la nieve, la blandura del barro, las sombras del bosque, eso pasó ayer, Yesterday....

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